Once finales ligueras para el Atlético
Los colchoneros han perdido once puntos en las últimas ocho jornadas
Es líder desde hace 19 jornadas, aunque empieza a notar la presión de sus perseguidores
Jonathan Moreno
Resopabla Simeone en la banda del Coliseum. Inquieto, enjaulado, desesperado y desencajado ante las oportunidades que se iban al garete en los minutos finales. La procesión en el argentino va por fuera. Pasional y expresivo como pocos, el Cholo ni puede ni quiere ocultar sus sentimientos. Aunque lo disimule muy bien ante los micrófonos.
El resbalón de Getafe no entraba en sus planes. El Real Madrid había doblegado ‘in extremis’ al Elche y el Atlético no se podía permitir darle una vida extra a Zidane, pero así acabó sucediendo. El cántaro fue y fue a la fuente. Se movió como piojo en las costuras de Bordalás. David Soria, el palo y la falta de puntería dijeron no. Dos puntos que se perdieron por el camino. Algo que empieza a ser rutina en Canillejas.
En las últimas ocho semanas de campeonato el líder de la clasificación se ha dejado once unidades. Cuatro empates (Celta, Levante, Madrid y Getafe) y una derrota (Levante) han desinflado el globo y devuelto la versión ‘Pupas’ de los colchoneros. De los once puntos de renta respecto a Madrid y Barcelona de la jornada 21 se ha pasado a seis con los merengues y, quizás, cuatro, si los azulgranas superan mañana su compromiso con el Huesca. Las dudas invaden a un vestuario blindado hasta la fecha y que no conjuga el verbo fracasar. La incertidumbre, sin embargo, ha provocado un estado de ansiedad que afecta al rendimiento deportivo. Y vienen más curvas.
Centrado en Champions
Porque el calendario no da tiempo a secarse las lágrimas. El equipo rojiblanco pondrá rumbo en las próximas horas hacia Londres, donde el miércoles (21.00 horas) disputará la vuelta de octavos de final ante el Chelsea. Los atléticos están obligados a remontar el 0-1 sufrido en el exilio de Bucarest, con la genialidad de Olivier Giroud. Tocará volver a hacer una ‘machada’ en las Islas Británicas, tal y como sucedió en marzo del innombrable 2020 en Anfield. En aquella ocasión, no obstante, los madrileños defendían un 1-0 y acabaron remontando en la prórroga con un doblete de Marcos Llorente y una diana postrera de Álvaro Morata. Difícil será. No imposible. Una hipotética eliminación centraría ya todos los esfuerzos del equipo en la consecución del título doméstico.
Antes del parón por compromisos internacionales, el Atlético pondrá broche a marzo contra el Alavés, equipo que pelea por ahuyentar el fantasma del descenso.
Feria de abril
La Liga se retomará con Perséfone entre nosotros. El cuadro capitalino tendrá un doble compromiso alejado del Metropolitano frente a dos rivales con aspiraciones de Champions. Dos partidos en la capital andaluza. Primero será el Sevilla y una semana después el Real Betis. Dos conjuntos que pondrán a prueba la estabilidad física y emocional del vestuario rojiblanco, que espera seguir ostentando el liderato por entonces. Huesca, Athletic y Eibar completarán el cuarto mes del año 2021. El penúltimo de competición.
El gol, cosa de dos
El irregular momento del Atlético tiene varios culpables. Simeone no ha encontrado la fórmula defensiva que plague de minas el camino a Jan Oblak. El técnico ha alternado distintos esquemas y ha apostado con fe ciega por el 5-3-2 para dotar de equilibrio la línea más importante de su equipo. A pesar de ello, los rojiblancos se han mostrado endebles donde antes eran acero puro. Las reiteradas ausencias de José María Giménez, el uruguayo completó los 90 minutos ante el Getafe, tienen gran parte de culpa. Sólo en dos de los últimos once partidos el meta esloveno ha conservado su portería a cero, encajando un total de doce tantos. Un promedio impensable en otra época.
Tampoco carbura la delantera, demasiado sujeta a la inspiración de Luis Suárez (18 goles). El uruguayo está completando una temporada mayúscula y fue el principal artífice de la ventaja obtenida en el primer tramo de competición. El balón ahora, sin embargo, no quiere entrar y el Atlético lo acusa. Salvo Marcos Llorente, que aporta más pólvora de la esperada y ya suma nueve ‘chicharros’ ligueros, hay un páramo preocupante en la línea de vanguardia. Joao Félix no cuaja (7), Correa (4) está para otros cometidos y Carrasco (2) sufre mucho desgaste partiendo como carrilero. La Liga entra en su fase decisiva y el Atleti ha perdido las áreas.
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