¿Quién para a Osimhen?

El nigeriano es el primer jugador que marca en siete partidos consecutivos de la Serie A desde la campaña 94-95

Osimhen se ha convertido en una máquina de marcar goles esta temporada

Victor Osimhen y Khvicha Kvaratskhelia son la temible pareja de un Nápoles que arrasa en la Serie A con 16 puntos de ventaja

Victor Osimhen y Khvicha Kvaratskhelia son la temible pareja de un Nápoles que arrasa en la Serie A con 16 puntos de ventaja / Agencias

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Victor Osimhen es una auténtica máquina de hacer goles y lo está demostrando esta temporada en un Nápoles imparable que domina la Serie A con puño de hierro. El nigeriano, junto a Khvicha Kvaratskhelia, es la gran estrella del conjunto partenopeo y el encargado de convertir el carrusel de balones que le llegan en cada partido.

Balones que Osimhen aprovecha para ver portería. Hasta 18 goles ha anotado el ex delantero del Lille en los 22 partidos que lleva disputados hasta el momento. Son cifras extraordinarias, pero más lo son si vemos lo que está haciendo en la Serie A, donde ha marcado hasta 17 tantos. Sus goles valen oro y, además, está en racha.

El nigeriano lleva marcando en siete jornadas consecutivas en Serie A, algo que nadie había hecho desde que en la liga italiana se puntúa con tres puntos la victoria (1994-1995). El último tanto, el anotado en el duelo ante el Sassuolo, donde el Nápoles volvió a dar una exhibición de contundencia ofensiva de la mano del propio Osimhen y Khvicha Kvaratskhelia.

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EL NÁPOLES DOMINA CON PUÑO DE HIERRO

Si Osimhen está en 'modo imparable', más de lo mismo en cuanto al equipo partenopeo. El Nápoles comanda la clasificación de la Serie A con suma facilidad, metiéndole ya hasta 18 puntos al segundo clasificado que es el Inter de Milán (que tiene un partido menos).

Los partenopeos saldaron su visita al campo del Sassuolo con una nueva victoria sin tener que hacer demasiadas florituras. Kvaratskhelia abrió la lata con una jugada espectacular y Osimhen encontró el resquicio en un disparo al primer palo que el meta rival se comió.