Gisela Pulido quiere sorprender en los Juegos

Como es habitual en cada cita olímpica, muchas esperanzas españolas a la hora de buscar medallas se centran en el mundo de la vela.

Desde aquel remoto metal de Santiago Amat en Los Angeles 1932, los regatistas siempre han estado en la lucha por las preseas olímpicas, y París 2024 no va a ser una excepción.

Gisela Pulido puede ser uno de los nombres propios de esta apasionante competición. La catalana será la última del equipo en competir, el 4 de agosto, en lo que serán sus primeros Juegos Olímpicos.

A sus 30 años, la regatista comentó que “he cambiado mucho como deportista y estoy muy ilusionada y con mucha energía para estos Juegos. Voy a disfrutar y a darlo todo. Ser la última en competir me da un poco más de tiempo para prepararme bien, estar las máximas horas en el agua y poder rodar. Antes podré disfrutar de las otras clases y ver de paso las condiciones, el campo y la motivación de ver a mis compañeros".

Pese a un reciente lesión de tobillo, la de Premià de Mar resalta que se siente "cien por cien preparada”.

Gisela competirá en la clase Formula Kite femenina, donde señala que las grandes favoritas son la francesa Lauriane Nolot y la inglesa Eleanor Aldridge: “Ellas son a priori las favoritas, pero en mi clase, el campo de Marsella deja todo bastante abierto porque es complicado. Habrá errores, mucha presión y lo más importante es ir con la cabeza en el sitio”.

La bahía de Marsella, donde se celebrará la competición, se adapta mejor a las características de la catalana: “Este campo de regatas me favorece. Aquí en cada sitio de la bahía te cambia la estrategia y de un día para otro puedes tener 6 nudos o 25, hay condiciones muy variadas y es un campo muy técnico. He trabajado mucho todas las condiciones, aunque con viento flojo es lo que peor llevo porque hay que pesar más".

La que fuera campeona del mundo de kitesurf con apenas diez años de edad siente ahora, dos décadas después, que ha llegado su momento en la gran cita del deporte universal.