La nueva arma secreta de Ancelotti… ¡es Valdano!

Lo ha reconocido ya en varias ocasiones el entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti. Esta temporada su equipo, al menos de inicio, va a cambiar de sistema, dejará el clásico 4-3-3, que tan buenos resultados le ha dado al conjunto blanco en los últimos tiempos y recuperará un esquema de juego que podríamos definir como ‘vintage’, muy utilizado en la época de los 90, después en desuso, y últimamente dejándose ver ya en las mejores pasarelas. Y este sistema no es otro que el 4-4-2 con rombo en el centro del campo, sin duda una variante táctica que va a ayudar a que el recién fichado Jude Bellingham juegue en una posición más natural.

Y vistos los pronósticos de Betfair, parece que la idea le va a salir bien a Ancelotti, puesto que el Real Madrid supera al actual campeón al FC Barcelona y es en este momento en el principal favorito para hacerse con el título de liga, con una cuota de 2€ por euro apostado, mientras que los culés cotizan a 2.4€ por euro apostado. En Champions los blancos también pujan fuerte como terceros candidatos a ganar la Champions con una cuota de 9.0.

Un sistema que vuelve a ponerse de moda

Como todo en la vida, el futbol también está muy pendiente de lo último en tendencias y en este momento, poblar el centro del campo está más de moda que formar un tridente en ataque. Lo hace el Barça de Xavi Hernández, el Manchester City de Guardiola o el Arsenal de Mikel Arteta entre muchos otros, y esta temporada también le toca al Real Madrid de Ancelotti. Este curso todo apunta a que girará en torno a una batalla ‘medular’.

La marcha de Benzema y la llegada del inglés Bellingham han propiciado que el técnico italiano vaya a cambiar un sistema como es el 4-3-3, que casi se puede decir que ha sido innegociable en su amplísima trayectoria como entrenador. Pero la diferencia, con respecto a los otros equipos es que en el Real Madrid vamos a ver un rombo en el centro del campo, como aquel Real Madrid de Jorge Valdano de la temporada 94-95. La referencia no es cualquiera. Aquel giro fue una revolución para el equipo blanco y el fin de una era de dominio absoluto en el Barça de Cruyff. El fin de la era del Dream Team.

El rombo de Valdano con Laudrup en la punta

Un Real Madrid en decadencia terminó la Liga 4º clasificado en la temporada 93-94. Por aquel entonces sólo el campeón de Liga jugaba la Copa de Europa. El Real Madrid tuvo que conformarse con la UEFA (antigua Europa League)… y gracias. Un paso más atrás y se hubiera quedado sin jugar en Europa. Ese curso, El FC Barcelona, dirigido por Johan Cruyff, volvía a proclamarse campeón en el último segundo, tras el famoso penalti que González le detuvo al deportivista Miroslav Djukic (de haberlo anotado, el Deportivo de la Coruña se hubiera proclamado campeón). Aquell fue el cuarto título de la regularidad consecutivo que ganaba un Real Madrid que olía a decadencia. Tocaba un volantazo.

Ese cambio tenía nombre de venganza (Jorge Valdano le quitó dos ligas al Real Madrid con el Tenerife), y lo hizo acompañado de dos fichajes de relumbrón, como Fernando Redondo y Michael Laudrup. Éste, después de dejar en la estacada al Barça de Cruyff y como seguramente uno de los jugadores de más clase de LaLiga.

Anclado a estos tres nombres, cambió todo. El Real Madrid empezó a jugar francamente bien. Una suerte de modelo previo al tiqui-taca actual. Con el delantero, Iván Zamorano lanzado (no paraba de meter goles cuando en la anterior campaña se había tirado seis meses sin ver puerta) el equipo era sólido en defensa y en el centro del campo, Redondo (hasta su grave lesión), y en especial Michael Laudrup se habían hecho los auténticos capos de un rombo que formaban junto a Amavisca y Luis Enrique.

Aquel equipo no solo se proclamó campeón de Liga, si no que fue capaz de tomarse la revancha que más necesitaban los aficionados madridistas. El 7 de enero de 1995, el equipo dirigido por Jorge Valdano endosó una ‘manita’ al FC Barcelona (5-0) en el Estadio Santiago Bernabéu, con hat-rick de Zamorano, Luis Enrique y Amavisca. Solo un año antes, el 8 de enero de 1994 los blancos habían encajado el mismo marcador, pero en contra y en el Camp Nou.

¿Y si viene Mbappé?

Todos los nuevos planteamientos de Ancelotti pueden cambiar si finalmente el Real Madrid acaba consiguiendo el fichaje de Kylian Mbappé, que según los pronósticos de Betfair es cada vez más posible, (1.36€ por euro apostado que fiche este verano por el club blanco, 2.63€ por euro apostado que se queda en el Paris Saint Germain).

Con el francés en la plantilla, El técnico italiano ya dispondría de un tridente espectacular junto con los brasileños Vincius Jr y Rodrygo Goes, lo que haría que tuviera que dejar a uno de estos fuera del equipo titular en el caso de que quisiera seguir con su idea de mantener el rombo en el centro del campo.

Dando por hecho que los fijos serían Mbappé y Vinicius, el gran sacrificado sería Rodrygo, pero cuesta pensar que este vuelva a ser carne de banquillo tal y como terminó la pasada temporada. Está claro que Ancelotti tendría un problema, pero como se dice en el argot y recalcan siempre todos los entrenadores, ¡bendito problema!