El traspaso que ha convertido a Boston en candidato número 1 a ganar la NBA

Los Celtics adquirieron antes de la noche del Draft los servicios de Kristaps Porzingis. El letón se unirá a Jayson Tatum y Jaylen Brown para llevar a los orgullosos verdes al título.

El traspaso que ha convertido a Boston en candidato número 1 a ganar la NBA

El traspaso que ha convertido a Boston en candidato número 1 a ganar la NBA / SPORT

betfair

Boston se anticipó a todo el mundo consiguiendo los servicios de Kristaps Porzingis a cambio de un 'paquete de pipas'. Esta expresión se aplica en la NBA cuando un equipo consigue a un estrella en un intercambio que requiere poco sacrificio, y eso fue exactamente lo que tuvieron que hacer los Celtics para hacerse con el pívot.

Porque dar a un base con carisma, pero poco talentos como Marcus Smart a cambio del unicornio letón es poco menos que una broma pesada. De hecho, el 'timo' hubiese sido más flagrante de haberse consumado el canje primigenio que no incluía a Smart, sino al base suplente Malcolm Brogdon como centro del intercambio por Porzings.

Esta incorporación convierte automáticamente a los Celtics en candidatos número 1 al anillo para la próxima temporada y nos trae de vuelta los tiempos en los que los big-three de los Celtics conseguían títulos a voluntad. En los albores de la NBA, un tridente compuesto por Bill Russell, Bob Cousy y John Havlicek llevó al equipo a la friolera de 11 títulos en 13 temporadas.

Ese mismo modelo se replicó en los 80 cuando Boston montó un equipo en torno a Larry Bird y que terminó por despuntar con las irrupciones de Kevin McHale y Robert Parish. El equipo ganaría tres campeonatos con este tridente histórico que fue considerado durante mucho tiempo como el 'front-court' más potente de toda la historia.

En la noche del Draft de 2007, Boston volvió a hacer un truco de magia único reuniendo en torno a la figura de Paul Pierce a dos superestrellas como Kevin Garnett y Ray Allen. El equipo verde -entonces liderado por un Danny Ainge que ya conocía el modelo del éxito de los big-three- lo dio todo para reunir a este tridente y devolver la gloria al año siguiente a Boston en forma de título.

Leyeron bien el mercado

Ahora los Celtics lo han vuelto a hacer con una jugada maestra al alcance de muy pocos. La directiva verde ha sabido leer a la perfección que Washington Wizards había entrado en un proceso de reconstrucción con el traspaso de Bradley Beal a los Phoenix Suns. Ha sido entonces cuando Boston ha abierto conversaciones para conseguir a un pívot que les puede permitir dar el siguiente paso.

Porzingis encaja a la perfección en la filosofía de una ciudad como Boston. El hecho de parecerse relativamente a Larry Bird en algunos aspectos del juego le otorga un plus para entrar directamente en el cariño de los aficionados. Sus números, sin embargo, tampoco desmerecen lo más mínimo con promedios de 23.2 puntos y 8.4 rebotes en la última temporada.

El letón tiene un potencial tremendo como para poder ser comparado con otros jugadores de su especie de hombres extraordinarios como Giannis Antetokounmpo o Victor Wembanyama gracias a unas tremendas condiciones físicas que le sitúan en los 2.21 de altura y en los 2.29 de envergadura.

Los inconvenientes de Porzingis

Quizá su talón de aquiles se encuentre en las lesiones que le han hecho perderse casi el 40% de los partidos en los últimos años y una alergia evidente al liderazgo que se ha dejado notar tanto en su paso por Dallas como en Washington. Pese a todo, a Porzingis no le viene nada mal este traspaso y hay motivos para soñar con que a sus 27 años cumpla con los pronósticos que le situaban como un jugador con capacidad de hacer cosas muy importantes.

En Boston no tendrá que liderar nada al estar ya asentados como jefes Jaylen Brown y Jayson Tatum. Los 65 partidos -de 82 posibles- que disputó en la última temporada en Washington son su mayor participación en una temporada NBA desde la 2016-17. Y por supuesto está el hecho de que los Celtics le han traído prácticamente a coste cero.

Que Jokic no se relaje porque los 'orgullosos verdes' ya tienen un nuevo juguete para intentar asaltar el anillo.