La regla de los 65 partidos que trae de cabeza a las estrellas de la NBA

El mejor jugador de la pasada campaña ya no podrá revalidar su título de MVP de la temporada regular.

Pese a que el pívot de los Philadelphia 76ers está promediando 35,3 puntos, 11,3 rebotes y 5,7 asistencias, ya se encuentra fuera de la carrera por una regla que entró en vigor esta temporada y que establece que los jugadores que no alcancen un mínimo de 65 partidos en temporada regular están descartados de la lucha por los premios individuales de la competición.

Una lesión en el menisco le impide luchar por cualquier premio. Es el primero en caer y seguro que no será el último.

La NBA tomó una contramedida ante el exagerado loading management (administración de esfuerzos) de sus estrellas en los últimos años, estableciendo esta regla que penaliza a aquellos que se pierdan 17 partidos o más de la temporada regular -un 20% al peso-.

La competición quiso blindarse ante unas televisiones que habían presentado quejas porque muchos jugadores se borraban de partidos sin justificación aparente.

La competición introdujo este apéndice en el último convenio colectivo firmado en 2023 y los jugadores se acaban de dar cuenta de que les han colado un gol por la escuadra.

Muchos de ellos optan a contratos mucho más lucrativos -muchos lo tienen en los variables- si obtienen alguno de los premios que otorga cada año la NBA: como jugador defensivo, mayor progresión, sexto hombre o entrar en alguno de los quintetos ideales.

Con las reglas actuales, dos lesiones leves pueden dar al traste con las opciones de un jugador de llevarse alguno de estos entorchados. La norma establece además que los jugadores deben estar un mínimo de 20 minutos en la cancha para que se les contabilicen los 65 partidos como válidos.

La NBA se ha asegurado sacar una mayor tajada a las televisiones, pero a cambio quizá de la salud de muchos jugadores que ahora se lo pensarán dos veces antes de no jugar un partido. Antiguamente, jugar los 82 partidos era casi una obligación para los jugadores de la NBA y salvo lesión grave solía ser así. MJ23, sin ir más lejos, disputó en 9 de sus 15 temporadas como profesional todos los encuentros de la temporada, incluida la última con 40 primaveras.

Las estrellas son blandas

Las actuales estrellas de la NBA son mucho más flojas en este aspecto y para muestra un botón.

LB sólo ha disputado los 82 partidos de la temporada regular en una ocasión en sus 20 años como profesional. Su actual promedio de partidos desde que viste la camiseta de los Lakers en 'Regular Season' es de apenas 56 encuentros. Estaba claro que algo había que hacer.

Y podríamos poner un sinfín de ejemplos particulares, pero lo cierto es que la NBA se ha puesto las pilas para proteger su competición en términos económicos.

No sólo las televisiones habían puesto el grito en el cielo, sino unos aficionados que compraban las entradas con unas expectativas y finalmente se encontraban otras con la ausencia de las estrellas. Se acabó el absentismo laboral de muchas de ellos.