El Barça golpea primero y amenaza la hegemonía del Real Madrid

El primer enfrentamiento de la temporada entre Real Madrid y Barcelona no decepcionó Ambos equipos presentaron una enorme intensidad en Las Vegas llegando incluso a las manos en la parte final de la primera parte tras una entrada fea de Jordi Alba a Vinicius Jr.

Blancos y culés regalaron un espectáculo que ya empieza a justificar los más de 60 millones gastados en su fichaje. El brasileño se aprovechó de un error en la salida de balón del Real Madrid para soltar un zapatazo desde la frontal ante el que Courtois no pudo hacer nada.

A los chicos de Xavi se les pudo ver más rodados gracias a que era su tercer partido de la pretemporada dominando el balón y también haciendo una gran presión alta a través de Gavi y Pedri. Los jóvenes azulgrana fueron muy superiores al nuevo centro del campo que estrenó el Madrid y que deja ver un relevo generacional. Ni Tchouameni ni Valverde tuvieron su mejor día en la organización del juego.

La mejor noticia para los blancos fue que los brasileños, Vinicius y Rodrygo, confirmaron su progresión en ataque. Fue raro que Ancelotti se decantase por Rüdiger como lateral zurdo titular cuando nunca ha jugado en esa demarcación y también se notó la ausencia de un Benzema que marca diferencias.

Courtois evitó más sangre

En el Barça, además de los jóvenes, la mejor noticia la dio la rápida adaptación de un Robert Lewandowski que en su debut se mostró incisivo y peligroso. Ni Alaba ni Militao tuvieron un día tranquilo ante el ariete polaco, que además obligó a Courtois a esforzarse para no encajar más goles.

Precisamente, el belga fue el jugador más destacado de los blancos con diversas paradas demostrando que sigue en el mismo capítulo que dejó en París ganando la decimocuarta Champions League. El Madrid pudo haber perdido por más, pero tampoco es menos cierto que de entrar el zapatazo de Valverde que se estrelló en el poste en el minuto 20 las cosas habrían cambiado mucho.

Pocas conclusiones más profundas se pueden sacar de un Clásico que confirma la tendencia a favor del Barça tras el 0-4 en el Bernabéu. Xavi le tiene cogida la medida a Ancelotti, pero estas conclusiones no son definitivas ante unos blancos que deben crecer para el 10 de agosto cuando se jugarán el título de la Supercopa de Europa ante el Eintratch de Frankfurt.

El Barça, por su parte, recarga moral y optimismo de cara a la temporada. Los culés han visto cómo los fichajes están dando sus resultados y ahora sólo hace falta materializar el optimismo en títulos. Las fuerzas se han igualado en el fútbol español y eso son buenas noticias.