Curiosidades

Estas son las últimas cenas más impactantes de los condenados en el corredor de la muerte

En el corredor de la muerte, cada preso puede elegir su última cena

Escena de la serie 'Orange is the new black'

Escena de la serie 'Orange is the new black' / SPORT.es

Son varios los países a lo largo del globo que aún hoy en día aplican la pena de muerte a ciertos tipos de delito. Hay ciertos países que son conocidos por ello, como por ejemplo Estados Unidos, pero no es el único.

Amnistía Internacional destaca 11 países que ejecutan personas de manera recurrente cada año. Se trata de China, Egipto, Irán, Irak, Arabia Saudita, Estados Unidos, Vietnam, Corea del Norte, Singapur, Sudán del Sur y Yemen.

Y es que, en Estados Unidos, los presos que están condenados a pena de muerte, una noche antes de que lleve a cabo su sentencia, tienen derecho a cenar lo que ellos elijan. Lo cierto es que, en muchas ocasiones, los presos no eligen la cena que muchos de nosotros elegiríamos.

Jackie Barron Wilson

Culpable de violar y asesinar a la niña Maggie Rhodes de cinco años de edad, fue condenado a muerte y ejecutado con inyección letal en la Penitenciaria del Estado de Texas, en el año 2006. Su última cena fue una cebolla cruda, 2 coca colas y un paquete de chicles.

Timothy McVeigh

De 33 años de edad, condenado a muerte por 168 cargos de asesinato en Indiana. Ejecutado con inyección letal en el año 2001. Su última cena fue un kilo de helado de menta con chispas de chocolate.

Victor Feguer

Victor Feguer, culpable de asesinato en Iowa en el año 1963, fue condenado a muerte por ese cargo. Como última cena pidió una simple aceituna. Según él, al comer la aceituna, un olivo nacería de su cuerpo como un símbolo de paz. La pidió sin hueso.

Lewis Gilbert

Fue declarado culpable del asesinato de un guardia de seguridad y dos ancianos. Fue condenado a muerte y le dieron un cóctel letal de drogas en la Penitenciaria del Estado de Oklahoma en el año 2003. La última cena fueron 2 helados de vainilla y algunos cucuruchos.