Las frases que los abuelos deberían dejar de decir a sus nietos, según este psicólogo

La devoción de los abuelos por sus nietos es imparable, los lazos que se forjan entre los pequeños y los mayores de la familia dejan huella y fomentan los recuerdos más especiales.

En muchas ocasiones para que la conciliación de los padres sea posible, los abuelos son los encargados de consentir a sus nietos en las vacaciones, puentes escolares o fines de semana.

Tres familias de Mallorca "resisten" el pulso de un fondo buitre vinculado al hijo de José María Aznar

El verano sin salir: qué hacer para reducir la brecha de las vacaciones marcada por la economía familiar

Dada la cantidad de tiempo que pasan con ellos, los abuelos terminan siendo una parte esencial de la vida de muchos niños. Expertos en psicología han advertido de algunas frases que los abuelos o abuelas, a veces, dicen a los más pequeños sin maldad pero que deberían evitarlas.

Según el portal dedicado a la crianza de los hijos 'Good to Know', algunos comentarios podrían herir a los pequeños de la casa. El psicólogo clínico Daniel Glazer, relata que los abuelos son aquellos: "a quienes recurrimos en busca de sabiduría, amor incondicional y, tal vez, unos pocos de mismos". 

"Pero incluso sus palabras bien intencionadas pueden causar inadvertidamente ondas debajo de esos exteriores cálidos y cariñosos", apunta.

"Es posible que comentarios aparentemente inofensivos no llamen la atención de otro adulto" pero sí pueden dañar "el frágil concepto que tienen de sí mismos los nietos pequeños".

Algunos comentarios pueden tener "un poder inesperado para socavar la confianza familiar y erosionar los cimientos emocionales", afirma.

Las frases que este experto desaprueba son las siguientes: "No se lo digas a tus padres" o "Tu padre y tu madre están equivocados sobre..." Tampoco recomienda decirle a los niños cosas como "eres mi nieto favorito" u "ojalá tu hermano se pareciera más a ti". 

Entran dentro de los comentarios prohibidos, también aquellos relacionados con el aspecto físico: "¡Estás muy grande! ¿Has engordado?", o frases como: "Solo los bebés todavía juegan con eso", "¿no es ese un juego tonto? o "¡será mejor que le des un abrazo y un beso a la abuela!", son algunos de los comentarios que los abuelos no deberían decir a sus nietos.