Expertos en comportamiento se pronuncian: este es el truco infalible para dejar de morderse las uñas

Abandonar esta costumbre no es fácil pero sí posible. Te decimos cómo hacerlo.

Para ayudar a los niños a dejar de morderse las uñas, debemos saber el motivo que hay detrás

Para ayudar a los niños a dejar de morderse las uñas, debemos saber el motivo que hay detrás

Morderse las uñas es un mal hábito que se arrastra desde la infancia y son muchas las personas que han intentado dejar de hacerlo y no lo consiguen. Regañar cuando no se consigue dejar este hábito solo provoca más estrés y ansiedad. Pero no te desesperes.

Este hábito se hace de manera compulsiva por lo que, por lo general, no te das cuenta de que lo estás haciendo. Pero si has decidido que ya ha llegado el momento de parar, haz caso a estos trucos que utilizan los expertos en comportamiento para hacértelo más fácil.

Morderse las uñas, además de las lesiones en los dedos, puede causar problemas oclusivos importantes en la dentadura y afecta directamente a la estética de las manos y también de los labios. Este hábito no está considerado como una enfermedad sino como una patología psicológica que se convierte en un hábito irreprimible y compulsivo.

Préstale atención a esta manía

Si morderte las uñas se ha convertido en una rutina que pasa totalmente desapercibida en tu vida y no te das cuenta de que lo haces una y otra vez, el primer paso que tienes que hacer es prestarle atención y tratar de ponerle freno cada vez que aparezca.

Trata de identificar por qué lo haces para convencerte de que no lo necesitas. Además, tienes que saber que todo suma y cada paso hacia adelante es un éxito por lo que tómate el tiempo que necesites y, sobre todo, sé constante.

Acude a un odontólogo

Un odontólogo puede confeccionar una férula que impida que se puedan juntar los incisivos superiores y los inferiores e imposibilitar así que se pueda cortar la uña con los dientes. Este tratamiento puede durar un mes y medio hasta que el paciente logre erradicar esta costumbre, y ocho para recuperar la estética de los dedos.

Esmalte sabor amargo

Usar un producto de farmacia que es un esmalte de sabor amargo provocará el rechazo a llevarse los dedos a la boca. Tan solo tienes que aplicarlo como un esmalte clásico sobre las uñas limpias y secas. Al secarse se vuelve transparente. Se puede utilizar al menos una vez al día y no hay límite de uso. Si quieres retirarlo, puedes hacerlo con un quitaesmalte.

Masticar chicles sin azúcar

Esta es una de las técnicas para dejar de comerse las uñas, cuya principal premisa es usar un sustitutivo para evitar en impulso automático. Podemos probar a masticar chicle para simular el movimiento de la mandíbula y dejar a las uñas cicatrizar.

Utilizar uñas postizas

Tal vez es una solución cara, pero vale la pena si se consigue erradicar el hábito. Evitará que la persona se dañe las uñas a la vez que permite su crecimiento.