La nueva técnica para burlar los radares de velocidad en carreteras que trae de cabeza a la DGT

En la constante evolución de la tecnología vial, la Dirección General de Tráfico (DGT) se enfrenta a nuevos desafíos para mantener la seguridad en las carreteras. Recientemente, ha surgido una preocupación creciente en torno a una técnica que parece eludir los sistemas de control de velocidad implementados por la DGT. Este fenómeno plantea preguntas sobre la efectividad de los radares y la necesidad de adaptar las medidas de seguridad para abordar este nuevo enfoque.

La DGT ha desvelado a qué velocidad saltan los radares

El origen de esta fechoría tiene lugar en un vídeo procedente de Italia, pero a nadie le extraña que poco a poco sea más en España. Es una técnica muy difícil de detectar por la Policía ya que exige de un examen meticuloso y cercano a las matrículas de los coches porque los conductores disponen de pegatinas con la forma de los números y las letras de la matrícula, del mismo tamaño. Esta pegatina se pega sobre la matrícula y es casi imperceptible.

Aunque la pegatina sobre el número no tiene ningún efecto aparente a simple vista, su tratamiento refleja la luz si se ve a través de un objetivo de un radar, desapareciendo el número en las cámaras de los radares de velocidad cuando saca una fotografía.

Es decir, si este tratamiento se termina aplicando en uno o dos números, la sensación es que el número desaparece por un reflejo accidental en la fotografía del radar, dificultando leer la matrícula y poniendo en cuestión la legalidad de la multa.

La sanción en caso de detectar este hecho es grave, con multas de hasta 200 euros a los conductores. Si se cambian los números o letra, se considera falsificación documental, con multas de hasta 6.000 euros y 3 años de prisión.