Opinión

El Caso Heurtel y lo que hizo Jasikevicius

La tendencia individualista de Heurtel ha contribuido a que este sea el Madrid menos reconocible de Laso

Thomas Heurtel, jugador del Real Madrid

Thomas Heurtel, jugador del Real Madrid / EFE.

Es probable que el Jasikevicius entrenador terminase a gritos con el Jasikevicius jugador. Es posible, incluso, que los defectos de Heurtel que más desquiciaron a Saras se parecieron demasiado a los suyos. A lo mejor es verdad. A lo mejor, las cosas que más detestamos de nosotros mismos nos molestan aún más cuando las vemos en los demás.

El jugador que más veces sacaba de sus casillas a Pesic en el Barça de Bodiroga era Jasikevicius. Seguro que les suenan los motivos: Pesic le pedía más defensa y que fuera menos anárquico en ataque.

El Jasikevicius entrenador se ha puesto en manos de Calathes, un perfil de base a las antípodas de lo que fue él. Con el griego empezó el desgaste de la relación entre Saras y Heurtel. Su fichaje supuso un cambio de rol para el francés, que no aceptó la idea de tener que ser un jugador de equipo de la segunda unidad. Jasikevicius vio el cambio de actitud y se fue hartando hasta que tomó una decisión drástica: apartar del equipo al MVP de las últimas copas ganadas.

La decisión fue la más incómoda –también la más impopular- de la Era Jasikevicius. Más aún tras conocerse que lo tenía hecho con el Madrid. Cuando el Barça se enteró, dejó al jugador en Estambul sin poder coger el avión. La decisión se hizo viral. Más de un año después, Laso ha decidido apartar a Heurtel, y Laprovittola (un descarte del técnico blanco) es un referente en el Barça.

La jugada, vista ahora con perspectiva, le ha salido redonda al Barça. La tendencia individualista de Heurtel ha contribuido a que este sea el Madrid menos reconocible de Laso.

Jasikevicius hizo lo que se le pide a un entrenador (detectar una tendencia y anticipar un problema) y a un líder (lograr que los otros te sigan). No es fácil tomar decisiones cuando amenazan la estabilidad de un vestuario. Saras lo hizo con estupendos resultados.   

En la explicación de Laso de hoy quedan claras las razones de Jasikevicius en su día. “Es una decisión técnica. Una decisión mía. No hay mayor historia. Bastante tengo con conseguir que el resto juegue a su mayor nivel. Lo que me preocupa es que juguemos como un equipo y seamos el equipo que queremos ser”.

'Jugar como un equipo', esa ha sido justamente la máxima de Jasikevicius desde que cambió el rumbo de la sección y el Barça recuperó el dominio de la ACB. La versión más generosa de Mirotic, o la implicación defensiva de Laprovittola, explican el sello del lituano. También su compromiso y exigencia con los jóvenes: “Cuando eres joven es normal llegar medio segundo tarde a cada acción, pero tienes que hacer faltas, saber sufrir y tirarte a por todos los balones. ¿Por qué son Calathes y Exum los que se lanzan al suelo a por la pelota? Estoy muy decepcionado", resaltó tras la última derrota en la Euroliga.

Es probable que no se entienda el Jasikevicius entrenador sin el Jasikevicius jugador. Lo cuenta en su biografía cuando recuerda cómo entrenaba. “Se me daba bien inventarme excusas y siempre buscaba la mejor zona para acortar un poco el recorrido cuando había que correr”. Quizás por eso ahora ningún jugador logra colarle ningún atajo.