¡Vuelve LaLiga!

LALIGA DE LAMINE Y MBAPPÉ

Con permiso del Atlético, que ha invertido mucho dinero en reforzar su plantilla, la Liga vuelve a plantearse como un pulso entre el actual campeón, el Real Madrid, y un Barça que, de la mano de Hansi Flick, peleará por recuperar el trono cedido la pasada campaña.

Y como ya es habitual, el duelo entre los dos grandes de la Liga enfrentrá dos formas de vivir y concebir el juego. Por un lado, el Real Madrid faraónico de Florentino Pérez, que este verano ha incorporado el cromo que le faltaba, Kylian Mbappé, un cromo que llevaba siete campañas siéndole esquivo. Por otro lado, el Barça del ADN que nace de La Masia y que busca reconstruirse alrededor de su última perla, Lamine Yamal, un futbolista que ha pulverizado todos los récords de precocidad y que parece llamado a marcar una época.

El Real Madrid ha pagado 150 millones por un futbolista que viene con la carta de libertad bajo el brazo. Una escalofriante cifra que se eleva con los 14 ‘kilos’ netos que percibirá por cada uno de los cinco años de contrato firmados y que le convierten en el futbolista mejor pagado de la plantilla. A ello aún hay que sumar el 80 por ciento de sus derechos de imagen. Mbappé se une al elenco de estrellas que reune el vestuario madridistas, encabezado por Vinicius y Jude Bellingham, que convierten al conjunto blanco en una especie de ‘Harlem Globbetrotters' futbolístico.

LA MASIA SALE AL RESCATE

Para hacer frente al flamante campeón de Liga y Champions League, el Barça, lastrado por su precaria situación económica, se ha puesto en manos de una cantera que nunca le ha fallado. A la estela de Lamine Yamal, cuyo precio de mercado se ha elevado hasta los 120 millones y por el que el PSG estaba dispuesto a desembolsar hasta 250, han irrumpido con fuerza en el primer equipo Pau Cubarsí, Héctor Fort, Fermín López, Pau Víctor, Marc Casadó y Marc Bernal que se unen a los ya consolidados Gavi y Alejandro Balde. Cantera contra talonario, una fórmula que nunca le ha fallado al conjunto blaugrana.

Más allá de su rivalidad histórica que traspasa los límites de lo futbolístico, Real Madrid y Barça volverán a enfrentar estilos, dos concepciones antagónicas de entender el fútbol. El madridismo solo contempla el resultado, por encima de todo. Para el barcelonismo, la forma cómo se llega al éxito es tan o más importante. Y en eso está el Barça, en un proceso de reconstrucción que le permita volver a ser reconocible y someter de nuevo al eterno rival, que en las últimas temporadas se ha beneficiado del fin de ciclo culer.

TEBAS SE FROTA LAS MANOS

Mbappé llega al Real Madrid como un futbolista consagrado. Quizá el mejor futbolista del planeta si no fuera por esa frustración de no ha-ber podido alzar la Champions League con el PSG. Y eso, precisamente, es lo que le ha decidido a dejar su París natal para enrolarse en el Real Madrid, que en la última década ha acaparado la máxima competición continental, con seis entorchados.

Lamine se perfila como el crack del futuro, por encima de su brillante presente, un presente que ya le ha permitido ganar su primer duelo contra Mbappé. Aunque sea con la selección española, en la pasada Eurocopa, cuando inició la remontada en las semifinales contra Francia con un mísil por toda la escuadra que dio la vuelta al mundo.

Y con este duelo que se perfila hay un personaje que se frota las manos, el presidente de LaLiga, Javier Tebas, que ve cómo este pulso entre Mbappé y Lamine vuelve a situar el campeonato español en el centro de todas las miradas, relegando a la todopoderosa Premier League a un segundo plano.

FLICK-ANCELOTTI: DUELO DE BANQUILLOS

También habrá pulso en los banquillos entre Carlo Ancelotti y Hansi Flick. El del Real Madrid es el entrenador que ha ganado más veces la Champions League, cinco, dos con el Milan y tres con el conjunto blanco. Y también es el único que ha ganado las cinco grandes ligas: Serie A (Milan), Premier League (Chelsea), Ligue 1 (PSG), Bundesliga (Bayern) y Liga (Real Madrid).

Pero Flick es uno de los entrenadores, tras Pep Guardiola con el Barça, que ha logrado el sextete de títulos en una temporada. Lo hizo la campaña 2019-2020 con el Bayern de Múnich.

EL ATLÉTICO ILUSIONA

Una temporada más, LaLiga EA Sports vuelve a abrir sus puertas al mundo. A pesar de un mercado de fichajes ciertamente insulso entre los equipos españoles -a falta de la traca final antes del cierre- el Atlético de Madrid ha sido el encargado de animar esta pretemporada armando una plantilla prometedora capaz de competir por todo. La igualdad se prevé total en muchas de las luchas particulares de cada equipo, que deberán volver a demostrar que pueden ser dignos de estar en la máxima categoría del fútbol español.

No es ninguna sorpresa destacar al conjunto colchonero como el gran protagonista del mercado de fichajes detrás de las grandes potencias. Simeone ha sido premiado este verano con muchas de las llegadas que llevaba tiempo solicitando, un equipo prometedor que deberá competir por todo sin excusas. Se marcharon Morata, Depay o Hermoso para que pudiesen venir Le Normand, Sorloth o Julián Álvarez. El desembolso ha sido importante en una plantilla que cuenta, por ahora, con el asterisco de Joao Félix como carta estrella que puede utilizar el entrenador argentino.

EUROPA SE IGUALA

Después del Atlético, quien más fuerte se presenta en su candidatura a las posiciones de Champions es el Athletic Club. Ernesto Valverde tendrá una plantilla suficientemente parecida a la que tuvo la temporada pasada a la espera de qué suceda con su estrella Nico Williams. El destino del extremo español marcará gran parte de las aspiraciones que puedan tener desde San Mamés, que siguen convencidos de que el futuro de su jugador está en casa esta temporada.

En una segunda línea quedan, en principio, Real Betis, Villarreal y Real Sociedad, que deberían pelearse las posiciones de Europa League y Conference. Los verdiblancos han sufrido bajas importantes como Guido Rodríguez, Miranda, Willian José, Chadi Riad o Ayoze Pérez, aunque han llegado refuerzos del calibre de Diego Llorente o Marc Roca. Los ‘groguets’ han renovado la plantilla, pero han perdido a su goleador, de Sorloth. Los ‘txuri-urdin’, por su parte, se han reforzado con nombres interesantes como Sucic, Sergio Gómez o Javi López, mientras que en el apartado de salidas solamente destaca Le Normand.

Los gigantes dormidos Valencia y Sevilla tienen esta temporada una nueva oportunidad para volver donde se merecen. El proyecto de García Pimienta en la capital andaluza ilusiona, mientras que en Valencia se contentan con la continuidad de Baraja a la espera de no sufrir muchas más bajas en lo que resta de mercado. La media tabla debería estar poblada por equipos como Osasuna, Mallorca, Getafe o Celta, que tienen potencial como para acercarse a posiciones europeas si alguno de los favoritos no tiene su mejor temporada.

MIEDO AL DESCENSO

La salvación, sin contar al Espanyol, debería pelearse entre equipos como el Valladolid, Rayo Vallecano, Alavés o Leganés, que mucho deberán sufrir si aspiran a mantenerse en la máxima categoría una temporada más con plantillas limitadas en muchas posiciones en comparación con sus competidores.

El inicio del campeonato se acerca y una nueva temporada de LaLiga EA Sports está a punto de abrir sus puertas. ¿Qué sorpresas deparará esta campaña 2024-25 que se prevé más igualada que nunca?

UN NUEVO GIRONA QUIERE REPETIR ÉXITOS

Sin Dovbyk, Aleix Garcia, Yan Couto, Eric García y Savinho, el conjunto ‘gironí’ tiene ante sí un reto mayúsculo: repetir la hazaña de la temporada pasada. Oriol Romeu ha vuelto a casa y Abel Ruiz apunta a ser el encargado de hacer olvidar al ucraniano

Los que saben de esto dicen que, normalmente, lo más complicado no es llegar a lo más alto, sino mantenerse. Al Girona le ha costado un mundo colarse entre los mejores cuatro equipos de España. De hecho, lo logrado la temporada pasada, sin repasar un juego al alcance de muy pocos, se podría tildar incluso de milagro. De estar hasta hace nada luchando por subir a Primera a codearse con Barça, Real Madrid y Atlético de Madrid.

Sin embargo, el fútbol no vive del pasado. Y lo logrado la campaña pasada de poco le vale a Míchel ahora. Al técnico vallecano le toca reinventarse ahora. Porque los equipos ya saben a qué juega este Girona, porque el factor sorpresa ya no existirá y porque, por encima de todo, toca construir un equipo prácticamente nuevo. De la columna vertebral de la campaña pasada ya no están Eric Garcia, Yan Couto, Aleix Garcia, Savinho y Dovbyk. O lo que es lo mismo, cinco titulares con los que Míchel ya no puede contar. Eso sí, de momento, siguen otros como Gazzaniga, Miguel, Yangel, Iván Martín y Tsygankov.

Así, si el éxito la campaña pasada fue una heroicidad, repetir la hazaña este año sería una auténtica locura. En esas anda el bueno de Míchel, que va haciendo su nuevo equipo mientras espera que Quique Cárcel termine de acabar de trazar su plan. Han llegado Krejci, Francés, Oriol Romeu, Bryan Gil, Van de Beek, Misehouy o Abel Ruiz, pero todavía queda, como mínimo, firmar un lateral diestro, un delantero centro y un extremo diferencial. Esas son las carpetas pendientes que tiene la dirección deportiva gerundense para afrontar una temporada no solo extraordinariamente exigente en la Liga, sino que también habrá que competir tanto en Copa del Rey como en la Champions, una de las grandes ilusiones esta campaña.

Lleguen todos los fichajes que se esperan o no, Míchel sabe que toca reinventarse, pero con la firme convicción de que el trabajo realizado hasta ahora es el que le debe servir a este equipo para seguir creciendo. El Girona seguirá siendo el mismo de la temporada pasada con otras caras y, seguramente, otras conexiones dentro del terreno de juego, pero mantendrá esa filosofía de ser un equipo creativo, que no tiene miedo a dejar desguarnecida su guarida y que buscará portería rival los noventa minutos del partido.

EL ESPANYOL, A POR LA PERMANENCIA

El equipo ‘perico’ regresa a Primera de la mano de Manolo González un solo curso después de bajar y luchará con todo para salvar la categoría. El Espanyol vivió el curso anterior una auténtica travesía por el desierto para finalmente acabar logrando el tan ansiado ascenso. El cuadro ‘perico’ tuvo que echar mano de hasta tres entrenadores y, mediante el ‘playoff’, regresó a Primera División.

No fue nada fácil el éxodo por Segunda y, por ello, buscará afianzarse esta temporada en la élite del fútbol. El reto y, a la vez, objetivo del equipo blanquiazul es bien claro: conseguir la permanencia con los mínimos apuros posibles.

El proyecto es de línea continuista tras la renovación de Manolo González como técnico. A su llegada en el tramo final de la campaña anterior, el entrenador gallego dotó al equipo de una solidez y consistencia defensiva que quiere mantener en Primera. En cambio, el déficit del conjunto ‘perico’ continúa siendo la eficacia goleadora, un problema que podría aumentar después de la salida este verano de Martin Braithwaite.

En cuanto a refuerzos, la delicada situación económica del club blanquiazul, con una deuda cercana a los 57 millones, ha imposibilitado acudir al mercado realizando grandes inversiones. En ese sentido, la dirección deportiva ha tenido que tirar de agentes libres y cesiones para poder reforzar al equipo. Y las llegadas de Álvaro Tejero, Carlos Romero, Alex Král o Alejo Véliz son algunos ejemplos. Como viene siendo habitual, el cuadro ‘perico’ seguirá apostando por la cantera. Jugadores con hambre, muchas ganas y un fuerte sentimiento de pertenencia que ayudarán a luchar cada punto en LaLiga.

El Espanyol tiene una tarea complicada en su objetivo de salvarse, pero volverá a contar con una afición que no defrauda. Con más de 24.000 abonados, no estará solo en la nueva y exigente aventura.