Victor Campenaerts en la etapa 18. @letour_es
Un calor sofocante, un terreno rompepiernas y diferentes cotas, pero no muy duras. Todos los ingredientes de una etapa de 179 km al más puro estilo de una clásica. Una jornada en casi siempre recae en una numerosa fuga que tiene que remar mucho para luchar por una merecida victoria.
Un triunfo que los ciclistas tienen que preparar a conciencia, sobre todo físicamente y mentalmente. Todo esto y más lo ha conseguido el ganador de la etapa de hoy, Victor Campenaerts tras su concentración de 9 semanas en un apartamento en Sierra Nevada.
El belga, tras esta minuciosa preparación, ha tenido su premio, la victoria en el Tour de Francia en la etapa 18 de este jueves 18 de julio. Una jornada entre Gap y Barcelonette que empezaba movida, al más puro estilo de las clásicas como la Paris Roubaix o la Flecha Valona.
Tras los ataques frustrados de varios ciclistas que han saltado del pelotón como van der Poel o Stuyven se ha formado la gran fuga del día en las rampas del Col du Festre.
Clasicómanos como Michal Kwiatkowski o Oier Lazkano y más escaladores como Healy, Hindley o Wout Poels formaban parte de los 35 ciclistas, los cuales ruedan con dos minutos de ventaja sobre el pelotón en el kilómetro 40.
Después que los ciclistas y los espectadores disfrutarán de los diferentes paisajes del sureste de Francia de la región de la Provenza-Alpes-Costa Azul se han desatado las primeras hostilidades con los ataques de Healy o Johannessen en el penúltimo puerto, Cote de Apollinaire. Ambos han sido sofocados lo que demuestra que la victoria en el día de hoy estaba muy cara.
Unos ataques que se tienen que hacer con confianza y piernas si no se quiere ceder como lo ha hecho el propio Healy a 60 km de meta. Todas unas escaramuzas que han dejado la escapada en 20 unidades que aún cuenta con los tres españoles, Aranburu, Lazkano y Raúl García Pierna, los cuales cuentan con 10 minutos del pelotón.
El momento clave ha sido a falta de 47 km, cuando el experimentado Kwiatkowski ha atacado antes de la última cima y se le han unido Vercher y Campenaerts. Detrás de ellos les perseguían dos grupos perseguidores encabezados por Hindley y Carapaz, pero sin opción de victoria.
La falta de entendimiento y de confianza de los ciclistas de ambos grupos ha hecho que Kwiatkowski, Vercher y Campenaerts se entendieran a las mil maravillas para luchar por la victoria durante los últimos 30 km.
Relevo tras relevo, los tres llegaron a los últimos metros en donde a falta de 200 metros, Campenaerts que parecía el más fuerte, adelantó a Kwiatkowski que iba más confiado para ganar al sprint. Un corredor de otro equipo diferente, el Lotto Dstny, que consigue una victoria en el Tour.
Un Campenaerts que se ha emocionado tras cruzar la meta al ver a su madre y a su recién nacido en una videollamada. Una dedicatoria especial para uno de los días que siempre recordará la familia.
Mañana se espera la etapa más dura de las dos más decisivas, con 144 km y más de 2.000 metros de desnivel acumulado. Un día entre Embun y Isola 2000 en donde se espera ataques entre los favoritos.