Foto: Siroko
Dependiendo del nivel que tengas quizá este artículo te parezca una perogrullada. Sin embargo, hay muchos ciclistas que no saben de qué hablamos cuando hablamos del sistema de capas para luchar contra el frío, la lluvia, el calor…
Esencialmente, cuando hablamos de “vestirnos por capas”, hablamos de disponer de distintas prendas con distintas características que podemos combinar de distintas maneras para hacer frente a las inclemencias del tiempo y las condiciones en las que vamos a rodar.
Es evidente que no montaremos en bici llevando la misma ropa en verano que en invierno, pues el frío y el agua (como principales inclemencias meteorológicas) harán que debamos llevar distinta ropa. Sin embargo no todo el mundo puede permitirse prendas muy específicas para las distintas salidas, por lo que muchos optan por este sistema de capas.
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Así pues, podríamos señalar dos principales ventajas de vestirse por capas:
Pero, ¿cuántas capas debemos llevar? ¿qué características deben tener las prendas?
Normalmente se distinguen 3 capas distintas y se suele aplicar al tren superior.
El mejor exponente de este sistema de capas suele ser la opción del maillot + chaleco cortavientos. Muchos ciclistas llevan un chaleco pequeño, que protege del frío en la parte más expuesta, el pecho, y que apenas ocupa espacio.
Y más allá del sistema de capas cabe destacar que puedes llevar complementos que protejan un poco más ciertas partes del cuerpo, como los manguitos o las perneras. Son muy versátiles y te salvarán de pasar un mal rato en ciertas ocasiones.