Los coches manuales se caracterizan por estar conformados por una caja de cambios que es accionada por el conductor cuando sea necesario indicarle la marcha que deberá llevar, se realiza a través de un pedal conocido como “embrague” quien es el encargado de activar o desactivar la transmisión de energía del motor hasta la caja de cambios para poder darle movimiento a los neumáticos del coche o cambiar la velocidad.Debido a que el embrague es una pieza utilizada durante todo el momento que nos encontremos frente al volante, se encuentra expuesta a presentar desgaste más rápido que otras piezas del coche, llevando a encontrarnos con un pedal de embrague menos preciso al realizar los cambios. A la hora accionar el embrague, este debe poseer cierta dureza para activar el tercer pedal interno que de paso al cambio de marcha. En ciertas ocasiones, con el paso del tiempo, podemos sentir como esta presión y dureza que caracterizaba al pedal del embrague disminuye o desaparece, dejando un pedal flojo y blando que debe ser atendido, ya que puede tratarse de una falla entre en collarín de empuje y el pedal externo, lo cual a la larga puede detonar otras fallas irreversibles o costosas de reparar en cualquier otra pieza o en los sistemas que conforman a los coches manuales.
Un pedal de embrague flojo es una clara señal de que algo no anda bien, en algunos casos es posible que el daño no se encuentre directamente en el embrague, lo cual no conlleva a realizar un cambio completo de embrague, sino la corrección de alguna otra pieza o el cambio de la misma. Independientemente de la pieza o cambio que se deba efectuar, DAPARTO ayuda a conseguir el repuesto requerido por buenos precios adaptables a nuestro presupuesto. Algunas de las causas más comunes que disminuyen la presión del pedal de embrague son las siguientes.
El líquido que compone al embrague (líquido de frenos) se encarga de acumular presión entre los cilindros que posteriormente será ejercida para accionar los cambios de velocidades en la caja, sin este líquido o sin la cantidad necesaria, es posible que la presión del pedal disminuya considerablemente.De acuerdo con las recomendaciones de los fabricantes, el líquido de frenos del embrague debe ser sustituido cada 2 años, ya que este con el tiempo caduca, lo cual puede ser otra de las causas que genera un pedal de embrague más flojo, por lo tanto, es necesario realizar una revisión constante de los niveles de líquido y su estado físico para recargarlo al nivel correspondiente si es necesario o sustituirlo por uno nuevo.
El bombín es el encargado del acople y desacoplo del disco de embrague para transmitir la presión necesaria, está formado por un retén hermético que se encarga de mantener en su lugar el líquido de frenos con el cual acciona, si dicho líquido se fuga o se daña en la bomba, inmediatamente estaremos frente a una nueva avería muy común en los coches manuales: un pedal blando con dificultades para regresar a su posición inicial y poder realizar nuevos cambios.
Para que un embrague se desempeñe correctamente, sus circuitos deben mantenerse totalmente aislados de los factores externos, ya que si el circuito no está cerrado, da paso a la entrada de aire que se mezcla con el líquido de frenos que actúa en el sistema hidráulico, imposibilitando así que los diafragmas de los discos de embrague reciban la presión adecuada. Dando como resultado un pedal flojo.