No quiero equivocar a nadie. No es el hijo ni el sobrino ni el nieto de Indurain (que, por cierto, cumplió este mes 60 años) con lo que por edad sí podría tener nietos.
Es Oier Lazkano que, con 1,90 de estatura, tiene un físico parecido a Miguel Indurain. Y una edad, 24 años, con la que sería maravilloso que se proclamase este sábado, 3 de agosto, campeón olímpico en París. A nosotros nos pareceria perfecto.
De Oier Lazkano se habla fenomenal. Ya ha sido campeón de España. Este año en el Tour ha hecho cosas. Pero, sobre todo, viendo como respondió en los finales en alto de la Dauphine Liberé, surgió esa pregunta, “¿Oier Induráin?”, porque se tiene mucha (muchísima) fe en su motor.
Xabier Muriel, director deportivo y preparador de Movistar Team, que trata con Lazkano desde su época en que coincidieron en el equipo Caja Rural-Seguros RGA respondió en Relevo a esta pregunta tras la Dauphine . “Que hiciera estas tres actuaciones al final de la vuelta, en días consecutivos, sí nos sorprendió un poco. No deja de ser uno de sus muchos pasos de gigante, tanto a nivel físico como en todo lo que no es físico: colocación, regularidad, capacidad de recuperación entre etapas. Se está convirtiendo en un gran ciclista”.