El refranero popular está lleno de frases que pueden ilustrar perfectamente lo que ocurrió el pasado domingo en la Amstel Gold Race femenina. “vender la piel del oso antes de cazarlo”, “birlarle la cartera”, “cantar victoria demasiado pronto”…
Tras diversos ataques y escapadas, se acabó formando un grupo grande de ciclistas que lucharían finalmente por la victoria al sprint. Fue entonces cuando Lorena Wiebes del SD Worx-Protime puso sus músculos al 100% para adelantarse a todas sus rivales. Eso sí, unos 5 metros antes de la línea de meta dejó de esprintar para alzar los brazos y celebrar la victoria. Sin embargo, por su lado izquierdo Marianne Vos (Visma-Lease a Bike) llegaba lanzada y le arrebataba en el último suspiro la victoria.
No es la primera vez que ocurre, ni será la última. Muchos ciclistas se confían demasiado pronto y al final, el más pillo del pelotón acaba venciéndoles.
La frustración de Wiebes tras enterarse de que no había sido la ganadora por un fallo suyo debía ser enorme. Como apuntó a la radio holandesa NOS tras la carrera, “es una sensación terrible. Y fue tan estúpido…”
Sin embargo, parece que no le volverá a ocurrir. “Es una buena lección y espero que no vuelva a suceder la próxima vez” explicó en la misma entrevista.