Sabemos que la bicicleta es un medio de transporte con múltiples beneficios: saludables para el organismo y respetuosos con el medio ambiente. Asimismo, es un deporte que permite socializar con otras personas y fomenta un espíritu de superación mientras se pedalea; y mientras tanto, ese rodar en bicicleta nos descubre rutas y paisajes maravillosos para todos los sentidos. Disfrutar de la bicicleta también implica hacer en condiciones de seguridad: buen equipamiento, cierta preparación física y, por qué no, contar con un seguro que cubra una incidencia mientras recorremos nuestra ruta.
Si somos ciclistas aventureros, que buscamos hacer rutas nacionales o aventurarnos a completar kilómetros en el extranjero es altamente recomendable la contratación de un seguro deportivo, como por ejemplo el Totalsports de Intermundial, que nos ofrezca una cobertura médica y mecánica ante cualquier incidencia que nos pueda afectar en nuestra salida con la bici. En España no es obligatorio que los ciclistas cuenten con un seguro, como sucede cuando se dispone de un coche, pero ¿por qué correr riesgos innecesarios que fastidien nuestras excursiones en bicicleta?
Esa tranquilidad, y seguridad, que se adquiere con la contratación de una póliza de seguros es impagable a la hora de emprender tu ruta. Además, la mayoría de las compañías ofrecen una serie de seguros bastante completos y personalizables en función a las necesidades de cada ciclista; y estas pólizas son a unos precios muy competentes.
Valga un ejemplo que entenderán aquellos ciclistas que compiten con una licencia federativa, cuyo coste oscila sobre los 100 euros anuales dependiendo de cada Comunidad Autónoma (un seguro básico puede contratarse por 30 euros y con acceso a promociones y descuentos) y, por ejemplo, no cubren el robo de la bicicleta, no incluyen las bicicletas eléctricas o no saben de viajes al extranjero o nacional, al no ser competiciones. Asimismo, las pólizas privadas pueden adecuarse a cada ruta. No es lo mismo una de carácter nacional que internacional.
¿Conoces las ventajas de contratar un seguro?
Esa seguridad a la que se hacía mención anteriormente se traduce en esta serie de beneficios que se obtienen al contratar un seguro de carácter privado:
- Asistencia médica: la importancia de contratar una póliza adquiere una gran importancia cuando tenemos planificada una ruta en el extranjero. La asistencia médica de España no es igual en el resto de los países. Si vamos a ir a otro país europeo o fuera del continente es recomendable incluir asistencia ante cualquier caída o la opción de rescate y posterior traslado a un centro médico de España.
- Cancelación de la ruta:irnos al extranjero o hacerlo a nivel nacional conlleva otra serie de gastos, como el alojamiento o el medio de transporte. Al tener un seguro privado podemos incluir la opción de interrupción del viaje, a consecuencia de una incidencia médica o técnica, y no perder todo el dinero.
- Bicicleta, segura: una avería puede amargarnos nuestras vacaciones en bicicleta, excepto si tenemos un seguro que nos incluye asistencia en viaje, como con un coche. Y esto es muy recomendable porque no siempre encontramos un taller o esa pieza que incluso nosotros podemos reemplazar. Esta misma lectura puede hacerse si trasportamos nuestra bicicleta en avión, donde, en ocasiones, suelen tener algún desperfecto.
- Rehabilitación: el seguro privado no sólo nos proporciona una asistencia médica en el momento de la caída, sino que también nos puede cubrir médicamente durante el proceso de recuperación.
- Robo: si nos despistamos, y un ladrón nos roba la bicicleta, esa póliza nos ayudará a comprarnos una nueva bicicleta. Obviamente, previamente, debemos declarar el tipo de bicicleta y todo su valor en el momento de firmar la póliza.
- Asistencia legal: en aquellos casos más complejos, derivados de algún tipo de accidente, quizá sea necesario contar con el asesoramiento de un abogado. Estos seguros también ofrecen esta opción, solucionando problemas de conocimientos normativos y lingüísticos.
Todos aquellos beneficios que van ligado a un aspecto económico (por ejemplo: gastos sanitarios en el extranjero, como cuando hacemos un viaje sin bicicleta) cuentan con un techo presupuestario que se establece en el momento de la contratación del seguro. E igualmente conviene indicar el país de destino. En este sentido, el precio anual del seguro se incrementa, pero en la mayoría de las compañías supera, por muy poco, los 100 euros de coste. No es un precio excesivo para disfrutar de la bicicleta en plenitud y sin preocupaciones.
¿En qué compañías podemos confiar nuestra seguridad?
La respuesta es tan clara como concisa: todas las aseguradoras ofrecen unas pólizas que nos permitirán hacer nuestros kilómetros de manera segura. No obstante, y como sucede en otros órdenes de la vida, conviene contratar estos seguros con empresas especializadas en seguros de carácter deportivo. Aparte de disponer de un conocimiento más profundo de la materia, estas empresas nos darán más opciones de personalización en comparación a una aseguradora no especializada en deporte.
En este sentido podemos destacar a Heymondo, pues destaca por su amplia variedad de personalización del seguro deportivo, ser una aseguradora especializada en deportes de aventura (no sólo de ciclismo) y contar con una aplicación digital para gestionar nuestra póliza desde cualquier rincón del mundo. La experiencia es otro aspecto positivo de IATI, una aseguradora centenaria y especializada en viajes y donde se incluyen opciones para ciclistas que buscan emprender aventuras en Europa y en el continente americano. El tridente de recomendaciones se cierra con Intermundial, una compañía altamente competente en esa ecuación de calidad-precio. Se treta de una opción recomendable para los ciclistas que viajen al extranjero. Sus seguros son muy asequibles y sus coberturas son muy completas, especialmente en temas de robo y asistencia técnica de las bicicletas.
