Un paraíso ciclista. Girona es bien conocida por ser uno de los mejores lugares para practicar el ciclismo de diferentes maneras: paseos, carreras, marchas cicloturistas etc. Una ciudad que se ha consolidado como un paraíso para los amantes de carretera, MTB y gravel. Un lugar ideal, con una combinación única de carreteras tranquilas, paisajes naturales y patrimonio histórico.
Entre sus joyas más preciadas se encuentran las vías verdes, antiguas rutas ferroviarias reconvertidas en caminos para ciclistas y senderistas. Estas rutas no solo ofrecen un recorrido seguro y agradable, sino que también permiten descubrir la riqueza cultural y natural de la región.
A continuación, te presentamos las cinco mejores vías verdes en Girona, ideales para una experiencia ciclista inolvidable.
1. Vía Verde del Carrilet I: De Girona a Sant Feliu de Guíxols
Esta ruta de 40 kilómetros es una de las más emblemáticas de la región. Comenzando en la ciudad de Girona, la Vía Verde del Carrilet I transcurre hasta la costa, en Sant Feliu de Guíxols. A lo largo del recorrido, se atraviesan de un paisaje variado que incluye valles, bosques y campos agrícolas.
Además, la suave pendiente descendente hace que sea accesible para ciclistas de todos los niveles, mientras pasas por pintorescos pueblos como Llagostera y Cassà de la Selva.
2. Vía Verde del Carrilet II: De Olot a Girona
La Vía Verde del Carrilet II, de 57 km, conecta la ciudad volcánica de Olot con Girona, a través de la espectacular comarca de La Garrotxa. Este recorrido es perfecto para los amantes de la naturaleza, ya que atraviesa el Parque Natural de la Zona Volcánica de La Garrotxa.
La ruta es más exigente en algunos tramos debido a su desnivel, pero la recompensa es un paisaje volcánico único y la posibilidad de descubrir pueblos medievales como Sant Feliu de Pallerols y Amer.
3. Vía Verde del Ferro i del Carbó
Esta vía verde, de aproximadamente 15 km, sigue el antiguo trazado ferroviario que conectaba las minas de carbón de Ogassa con Sant Joan de les Abadesses y Ripoll. Aunque más corta que las anteriores, la Vía Verde del Ferro i del Carbó ofrece una experiencia enriquecedora al combinar historia industrial con paisajes montañosos. Es una ruta ideal para una escapada familiar o para ciclistas que buscan un recorrido tranquilo rodeado de naturaleza
4. Vía Verde del Tren Petit
Con sus 6 km de extensión, la Vía Verde del Tren Petit es una opción corta pero encantadora que conecta Palamós con Palafrugell. Este recorrido costero ofrece impresionantes vistas del Mediterráneo y la posibilidad de hacer una parada en las hermosas playas de la Costa Brava.
A pesar de su breve longitud, es perfecta para aquellos que buscan combinar una jornada de ciclismo con un día de playa o una visita a los pintorescos pueblos pesqueros de la región.
5. Vía Verde de la Vall de Zafán
Aunque menos conocida que las demás, esta ruta de 29 km sigue el antiguo trazado ferroviario que recorría la Vall de Zafán, cerca de la frontera con Aragón. La Vía Verde de la Vall de Zafán ofrece un recorrido por paisajes rurales y montañosos, con vistas panorámicas del río Ebro.
Esta es una opción excelente para aquellos que buscan una experiencia ciclista más tranquila y solitaria, lejos de las rutas más transitadas, y que valoran la conexión con la naturaleza.
Girona ofrece una variedad de vías verdes que combinan historia, naturaleza y ciclismo. Estas cinco rutas son solo una muestra de las posibilidades que esta región tiene para los amantes del ciclismo, cada una con su propio encanto y características.
No importa si eres un ciclista experimentado o un aficionado, las vías verdes de Girona te esperan para brindarte una experiencia inolvidable.
