Wout van Aert se caracteriza por ser un ciclista ambicioso, polivalente, disciplinado y tranquilo. El belga puede dejar sus ambiciones de conseguir el maillot amarillo para ayudar a su líder, tal como pasó con el pinchazo de Vingegaard en la etapa de los adoquines en el Tour de Francia de 2022. Además, su instinto de competitividad llega a tal punto que un meritorio segundo puesto puede ser una mera decepción.
Pero, cuando Van Aert empieza a carburar y encadenar excelentes resultados, es cuando el belga vuelve a alegrarse y sonreír. Una situación que se está dando en la Vuelta a España 2024, en donde el ciclista de 29 años es uno de los líderes del Visma. El belga, tras quedar tercero en la contrarreloj y segundo en la jornada de ayer, ha vuelto a la senda de la victoria en la tercera etapa al sprint.
El belga es feliz y vuelve a conseguir alzar los brazos después de mucho tiempo, demasiado para un campeón mundial como él. El caso es que Van Aert pone fin a una de las mayores sequías que ha sufrido durante su carrera profesional. Cabe recordar que viene de un año con una grave caída en Dwars door Vlaanderen.
Pero, fiel a su personalidad, el belga no se ha puesto nervioso y ha querido estar en su mejor momento.“Es bonito que funcione así. Merece la pena ser paciente”, reflexiona la superestrella del Visma – Lease a Bike tras la etapa.
La realidad es que el ciclista del equipo neerlandés ha tenido que esperar casi seis meses para conseguir una victoria, desde la Kuurne-Bruselas-Kuurne en febrero. Cosa que no le preocupa en absoluto “¡Ha pasado tiempo, pero esto sienta tan bien!”. Un ejemplo de inspiración para muchos.
Un éxito que supone su décimo triunfo en grandes vueltas tras los nueve conseguidos en el Tour de Francia que sabe a gloria Además, con los segundos de bonificación aumenta su ventaja en la clasificación general.
Primer final en alto
Pero, ahora, Van Aert volverá a estar a disposición de su equipo, sobre todo de Sepp Kuss y Cian Uijtdebroeks, los cuales tienen mañana mismo una etapa de media montaña con una subida súper dura en el Pico Villuercas, con 3 kilómetros sobre cemento y rampas del 15-16%.
Una jornada de 170 km entre Plasencia y el Pico Villuerca que será la primera prueba para los de la clasificación general. Van Aert tiene claro que como será muy difícil mantener el maillot, intentará disfrutarlo una vez más.
