La situación económica del Barça es extremadamente delicada. La aplicación de un modelo de gestión insostenible por parte de la junta directiva de Josep Maria Bartomeu y el gigantesco impacto de la pandemia del coronavirus en términos financieros han situado al club azulgrana entre la espada y la pared. Con un margen de maniobra excesivamente angosto, el presidente Joan Laporta está obligado a ejecutar una reestructuración profunda del primer equipo de fútbol masculino. El verano será largo. Muy largo. Se tendrán que tomar cuantiosas decisiones transcendentales en los despachos de la zona noble del Camp Nou.

El mercado que le espera al Barça (leer noticia)