El regreso más especial de Rutenka

"Espero poder reunirme con mi familia, con los amigos, a pesar de que tendré poco tiempo, ya que llegamos mañana y nos vamos después de jugar el partido", ha señalado Rutenka, para quien es la primera vez que, cuando se cumplen quince años de su debut en competición europea de clubes, el capitán de la selección de Bielorrusia vuelve a su país como rival.

Ha expresado su esperanza de poder jugar mañana ya que arrastra algunos problemas en su rodilla izquierda. "Después de la derrota en la pista del Fuchse Berlín, teníamos que ganar al Croatia de Zagreb para ser primeros de grupo. Lo hicimos el sábado y en Minsk no nos jugamos ya nada. Ya veremos si jugaré", ha destacado.

Aunque él nunca jugó en el Dinamo, ya que militó en el Arkatron Minsk, enfrentarse al campeón bielorruso siempre es especial y ha recordado: "En la primera vuelta nos pusieron las cosas difíciles en el Palau. Ganamos por un solo tanto (25-24) y fue un encuentro un poco raro".

No le ha sorprendido que el Dinamo Minsk se clasificase para la siguiente ronda a falta de tres jornadas para finalizar la fase de grupos. Considera que los jugadores del Dinamo "están logrando resultados notables en la temporada y tal como han ido las cosas era de esperar esta clasificación. Digo esto porque conozco muy bien a los jugadores del equipo, especialmente a mi hermano Dziannis, y han tenido un rendimiento muy bueno. Se merecen entrar en la fase final".

Cree que la afición local le recibirá bien. "No hay razones para que sea al contrario. Sólo por el hecho de que el partido se disputa en Minsk tengo mucha ilusión por jugar", ha asegurado.